Existen varias razones para cambiar tus antiguas ventanas por unas nuevas ventanas de PVC en JM Escobar.
El PVC aporta a las puertas y ventanas unas excelentes ventajas y propiedades aislantes ya que este material no se ve afectado por los cambios climáticos y tienen una larga duración sin necesidad de ningún tipo de mantenimiento.
Las ventanas de PVC son muy respetuosas con el medio ambiente. No sólo no desprenden sustancias tóxicas a la hora de la elaboración, sino que se pueden reciclar para producir nuevos, ahorrando así energía.
A continuación os resumimos los principales beneficios de puertas y ventanas de PVC.
- Son muy versátiles. Gracias a sus diferentes sistemas de apertura, colores y acabados, pueden adaptarse a cualquier necesidad en el hogar.
- Ya lo hemos mencionando anteriormente, y es que este increíble material no se ve afectado por los cambios climáticos y de temperatura.
- Supera en durabilidad y resistencia a las puertas de madera y son más aislantes que las de aluminio.
- No requiere ningún tipo de mantenimiento, y para su limpieza es suficiente con agua y jabón.
- Consigue un tranquilo y agradable ambiente en tu hogar gracias al alto nivel de aislamiento contra el ruido combinado con vidrios acústicos. Un gran vidrio acústico pierde su eficacia si es montado en una mala ventana.
- Gracias a su poder aislante, reduce el frio manteniendo un hogar cálido en invierno y mantiene el calor fuera del hogar en verano. Permitiendo así ahorrar energía reduciendo el consumo de calefacciones o aires acondicionados.
- Son respetuosas con el medioambiente.
- La perfilería para puertas y ventanas de PVC tienen un refuerzo de acero en su interior que las hace muy seguras. Las ventanas cuentan con sistemas anti palanca para evitar ser forzadas por intrusos mejorando así la protección de tu hogar.
- Los materiales de PVC son difícilmente inflamables y auto extinguibles. No propagan la llama de un posible fuego.
- Son resistentes a la erosión salina y a la corrosión, ideales para ambientes marinos donde las ventanas de madera o aluminio se ven rápidamente afectadas por la salinidad.